lunes, 6 de febrero de 2017

Vía Hidalgos. Los Guerreros.








Hace años que intentamos escalar en los Guerreros después de una vía en el Pájaro. Tenía malos recuerdos, chapas lejos, una movida para bajar de la cumbre... en fin que no era algo muy seductor.

Pero a Nacho le motiva el risco, le gusta mucho y lleva varios findes diciéndolo. Pues ale, habrá que ceder; si no, te vuelves un puto egoista (luego no quieren salir contigo los amigos de siempre).

Bueno, sinceramente subimos a la Vía de la Telefónica del Pájaro. Pero como estaba chorreando agua... (Ya van dos veces que la intentamos) Asique plan alternativo.


Llegas a la base, un poco acojonado; Nacho y yo empezamos a dudar al ver las chapitas lejos.
Pero como vamos con una que tiene más cojones que nosotros nos quita el cabo caliente de la cuerda. Helena se mete el primer largo, y la saco unas fotos.













Que quieres que te diga. Están lejos las chapas, pero es Vº. Es fácil, pero hay que meterse.





El segundo largo va a pelo, sales de la reunión y no queda muy claro si es un poco más arriba o justo a la derecha. La pregunta de siempre ¿Quién va? Helena dice que ya ha tirado ella, que tire otro. Yo miro a Nacho y me da la risa... pues nada voy yo. ¿De verdad que no quiere ir nadie? Ve tú. Me dicen. Lo repito como dos veces más por si acaso.



Sales y subes a pelo y punto, si llevas un friend gordo pues lo pones, pero no llevaba. Habrá gente que salga a la derecha de la reu mediante un paso de brazos. Justo en ese paso, en el labio de roca hay un casquillo de un obsoleto spit.

Yo prefiero subir a un canalizo romo que hay como una huevera. Por fin llegamos a la reunión todos. Rapelamos desde allí, lo de subir a la cumbre de arriba no tiene mucha gracia. Una galleta buena te puedes dar.




¡Qué buen día! Mis compañeros rematan la mañana haciendo la placa de la Pent-hause de la cara Oeste del Pájaro. Muy molona.